Terapia de pareja
Todas las relaciones pasan por momentos de crisis, que una vez superadas, refuerzan y hacen crecer la relación. El problema aparece cuando la relación no es capaz de encontrar soluciones y se estanca.
Los motivos del problema pueden ser muy variados: monotonía, pérdida de ilusión, distanciamiento, discusiones cada vez más frecuentes, conflictos a la hora de educar a los hijos, infidelidades, celos, exceso de dependencia y demanda un afecto de un miembro de la pareja, pocos intereses en común, falta de apoyo intramarital… o, lo más frecuente, parejas que simplemente no saben lo que les sucede y no paran de discutir, pese a esforzarse por hallar una solución.
Nosotros trabajamos para poder recuperar la relación, y si esto no pudiera conseguirse porque la pareja considera que se ha extinguido el sentimiento o que no les compensa el esfuerzo necesario para mejorar, el objetivo sería que su separación resulte lo menos traumático posible.